Siempre me ha fascinado cómo los periódicos arriman el ascua a su sardina y esconden o agitan aquello que les interesa. El caso de la operación Gürtel y los ya famosos trajes del presidente valenciano, Camps, es un ejemplo. Lo vemos hoy en las ediciones online de los periódicos.
Hoy, mientras El Mundo titula
Hoy, mientras El Mundo titula
El auto del TSJ revela que Camps no pudo probar el pago en metálico de sus trajes,
que es un titular en el que, si lo lees de corrido, no te enteras mucho de lo que está diciendo y tienes que acudir a un faldón lateral para encontrar que "El juez ve 'indicios de delito' para abrir juicio oral contra Francisco Camps".
Por su parte, El País exhibe orgulloso su trofeo:
Por su parte, El País exhibe orgulloso su trofeo:
El juez ve indicios suficientes de cohecho en Camps,
y sólo les falta hacer la ola y regalar una bolsa de confeti mañana a sus lectores, para celebrar que están acabando con uno de los posibles recambios de Mariano Rajoy. Eso sí, hay que felicitar hoy a El País porque en ese mismo artículo revela las últimas novedades de la investigación: la embarcación de recreo de la trama (sic) se llamaba Parapipi, ahí es nada.
Por último, si el titular de El Mundo parecía alambicado, el del ABC es para echarse para atrás:
Por último, si el titular de El Mundo parecía alambicado, el del ABC es para echarse para atrás:
El juez rechaza archivar la causa contra Camps por posible cohecho.
Rechaza archivar, posible cohecho. Bien. Yo no sé si le regalaban o no los trajes, ni si se los regalaron y los devolvió, ni si un traje es mucho o poco para un cohecho o un cohechito. Sólo pregunto si es más o menos cohechito que una constructora a la que le adjudicas obras públicas te regale a ti y a todo tu equipo décimos de lotería, décimos que pueden acabar premiados. ¿Usted qué cree, ministro?