lunes, enero 28, 2013

La maldición de los número 2

Cuando se acercan las elecciones, los partidos políticos muestran cierta tendencia a lavar su imagen, intentando abrirse a la sociedad. Una de las estrategias más masticadas es la de incorporar flamantes números 2 a sus listas, personas conocidas por el gran público que llegan como paracaidistas a las candidaturas. El flamante número 2 suele llegar entre sorpresas y aplausos de la prensa y cierta indignación entre los militantes de toda la vida (que se preguntan ¿por qué ese ha podido llegar tan alto sin haber picado piedra?), pero inmediatamente después de las elecciones suele disolverse cual azucarillo. Repasemos algunos de los casos más sonados.

5. GICA CRAIOVEANU

Fichó por el Getafe cuando jugaba en segunda división, en la temporada 2002-2003. Cuatro años después y tras su retirada, fichó por el Partido Popular como número dos a las elecciones municipales de 2007, perfilándose como concejal de deportes. Sin embargo, el PP volvió a perder frente a Pedro Castro (sí, aquel que hablaba de los tontos de los cojones que votan a la derecha) y Craioveanu ni recogió su acta de concejal.

4. MERCEDES CABRERA CALVO-SOTELO

A lo mejor ni la recuerdan ya, pero esta mujer llegó a ministra y todo. En las elecciones generales de 2004, las primeras de Zapatero, se rumoreaba que el PSOE iba a incorporar a un superfichaje como número 2 de ZP. Solo se sabía que iba a ser mujer y que iba a ser conocidísima. No sabemos si es que todas le fueron diciendo que no o qué, pero al final el PSOE incorporó como número 2 de Rodríguez Zapatero a la archiconocidísima Mercedes Cabrera. A pesar de la victoria electoral y haber ido en un puesto tan alto, quedó como diputada rasa. No obstante, en 2006 fue nombrada Ministra de Educación. No recordarán nada de su paso por el ministerio, porque por aquellos años el gobierno del PSOE estaba entretenido exclusivamente en sacar adelante el Estatuto de Cataluña y la negociación con los terroristas.

3. MANUEL PIZARRO

Cuando todo el mundo creía que Alberto Ruiz-Gallardón iba a ser el número 2 de la lista del Partido Popular por Madrid en las elecciones de 2008, va Rajoy y anuncia al expresidente de Endesa como candidato. Pizarro salió a la arena con mucha energía y se fue apagando. Su duelo televisado con Pedro Solbes quedará para la posteridad como una muestra de cómo se puede decir la verdad y perder estrepitosamente un debate debido a las mejores tablas dialécticas del adversario. Dicen que ahora anda con Esperanza Aguirre, haciendo de fiscal anticorrupción del PP, o algo así.

2. MONTSERRAT NEBRERA

Créanme que para declararse públicamente votante del PP en Cataluña hay que ser valiente, pero créanme que hace seis o siete años era todavía peor. Montserrat Nebrera tuvo el valor de presentarse como número 2 de Josep Piqué en las elecciones autonómicas de 2006, con el partido en descomposición y los ánimos por los suelos después de todo el proceso estatutario. El PP tuvo un resultado mediocre, la Nebrera no tuvo ningún protagonismo en el parlamento catalán, Piqué se fue, pasó fugazmente un tal Sirera, y después llegó un congreso en el que nuestra protagonista se enfrentó a Alicia Fernández Díaz en flagrante inferiodad de condiciones. Tras perder, Montserrat Nebrera podría haber optado por una retirada honrosa, pero empezó a boicotear a la nueva lideresa, acabó abandonando el partido y ahora anda por los medios del grupo Godó reclamando la independencia de Cataluña.

1. BALTASAR GARZÓN

Es un hecho: un juez de la Audiencia Nacional se presentó como número 2 de un partido político a unas elecciones. Quién si no, Baltasar Garzón Real. Felipe González lo fichó en 1993 como candidato ejemplar, para demostrar al populacho que ahora el PSOE sí que iba a ser implacable contra la corrupción. Garzón debía creerse que lo iban a hacer ministro de Justicia o vicepresidente, pero va Felipe y lo nombra Delegado del Plan Nacional sobre Drogas. Garzón, despechado, se marchó del PSOE a los cuatro días, volvió a los tribunales y trató de meter en la cárcel a toda la cúpula del gobierno por terrorismo de estado, el mismo gobierno que apenas meses atrás lo había fichado.



martes, enero 01, 2013

Un par de gráficas

Ya es un tema muy masticado, pero tras ver el resumen informativo del año 2012 con el que la televisión autonómica catalana nos obsequió la otra noche, me veo obligado a escribirlo. Como la cantinela oficial anuncia que hay que ver cómo de grande es el auge del independentismo, y que madre mía cuánta gente se está apuntando masivamente al Partido Único Catalanista, dejo por aquí una gráfica que en realidad ya todo el mundo conoce, y otra más para comparar con la primera:
Tres aclaraciones:
(1) PSA son las siglas del Partido Socialista de Andalucía, que logró representación en las primeras elecciones autonómicas catalanas y después ya fue abducido por el Partido Único.
(2) He considerado al PSE como españolista porque, a la hora de la verdad, y a diferencia de su homólogo catalán, su adversario principal es el PNV y no Madrid.
(3) En 1980, en el Parlamento vasco se elegían 60 representantes; a partir de 1984, se eligieron 75.