sábado, septiembre 20, 2008

Qué suerte no ser norteamericano


No estoy precisamente orgulloso de ser español, más bien lo contrario, pero de todas maneras es un alivio no ser norteamericano: me ahorro así el terrible dilema de tener que votar a uno de esos dos inútiles que se presentan como candidatos a la presidencia.

En España y en media Europa, la internacional mediática se decanta indisimuladamente por Barack Obama, hace una extraña identificación entre los partidos socialdemócratas europeos y el Partido Demócrata norteamericano y aplaude cualquier vaguedad y/o contradicción de las muchas que suelta el candidato demócrata. Nada sorprendente, nada que no hayamos visto antes. No obstante, también es relativamente fácil encontrar a autodenominados liberales o conservadores españoles que apoyan a McCain, se apuntan a plataformas de apoyo en Facebook o sitios similares y hacen también una no menos extraña identificación entre el liberalismo económico y el Partido Republicano de los Estados Unidos.

Con más de doscientos años a sus espaldas, Estados Unidos es una democracia avanzada, y como tal, arrastra la desgracia de que los profesionales de la política hayan avanzado mucho más que en España: por poner un ejemplo, es impresionante que una señora que se hizo el pasaporte por primera vez el año pasado aspire a ser la vicepresidenta del país más importante del mundo o que un tío que lleva cuatro días como senador y no se le conoce ninguna actividad remarcable aspire a ser el presidente. Llevamos meses y meses de aburridísima y larguísima campaña donde de lo que más se habla (o al menos eso es lo que nos llega aquí) es de las gafas de la Palin, de si Obama tiene hermanos pobres o de las cónyuges de los candidatos. Pues oiga, que les zurzan.

Sí, yo si fuera norteamericano, finalmente también votaría por McCain, porque es un candidato mucho más sincero que su contrincante demócrata y parece algo más aseado intelectualmente. Pero de analogías ideológicas con este lado del atlántico, nada de nada. Lástima que no se presente Hillary Clinton.