El canciller Otto von Bismarck, que algo sabía acerca del arte de mandar, sostenía que el político piensa en la próxima elección y en el estadista en la próxima generación.
No sé si será propio de estadistas un gran pacto de Estado PP-PSOE en la próxima legislatura para recomponer lo que quede del sistema constitucional español malherido por el presidente Rodríguez, pero lo que sí está claro que es cortoplacismo es volver a la tradición de los pactos gobierno central-nacionalismos, que no han hecho más que eternizar los dos grandes problemas de España en las últimas décadas: intervención económica y regionalismos identitarios.
No sé si será propio de estadistas un gran pacto de Estado PP-PSOE en la próxima legislatura para recomponer lo que quede del sistema constitucional español malherido por el presidente Rodríguez, pero lo que sí está claro que es cortoplacismo es volver a la tradición de los pactos gobierno central-nacionalismos, que no han hecho más que eternizar los dos grandes problemas de España en las últimas décadas: intervención económica y regionalismos identitarios.