viernes, febrero 18, 2005

Ni sí ni no: todo lo contrario


Este viernes se cierra la inédita campaña sobre el referendum del próximo domingo 20 de febrero, acerca de la Constitución Europea. Lo cierto es que ni ha habido campaña (porque antes de su inicio, ya se pedía explícitamente el sí o el no), ni el texto que se nos brinda tiene rango de Constitución, ni siquiera hay en realidad un referendum.

El espectáculo de este domingo será un sainete, una burda representación en la que la partitocracia se mofará de la ciudadanía: los políticos en general, y los del partido en el gobierno en particular, tratan de hacer creer a la gente que este domingo la decisión mayoritaria de los ciudadanos que vayan a votar será efectiva, vinculante. Y es falso. Este domingo no hay ningún referendum, se trata sólo de una consulta popular, de una macroencuesta sin ninguna validez jurídica.

Quien verdaderamente aprobará la Constitución Europea será el Parlamento español, y no lo critico. Lo que detesto es que se nos haga creer que la jornada del domingo es importante. Los ciudadanos no podemos permitir que se nos considere tan sometidos al poder político: ni Referendum Plus, ni Europa de los Pueblos, ni Los primeros en Europa, ni otras zarandajas.

Por este motivo, aquí un servidor, que sí cree en la llamada "construcción europea" y no quiere que se le trate como a un voluntarioso súbdito en estos asuntos, se ocupará concienzudamente de abstenerse en la votación del domingo.

Sólo me queda decir: recordemos que el CIS pronostica un 68% de participación.