viernes, febrero 04, 2005

Secuelas del debate (I)


Perlas oídas en el debate sobre el plan Ibarretxe, el pasado martes en el Congreso:

"Para hacer madurar esa propuesta, en nuestra opinión, es imprescindible mantenerla en el útero del País Vasco, mantenerla en el útero matricial, para que esa propuesta sea viable y madure."

"Esas son las razones, señorías, para que nosotros en estos momentos consideremos que el proceso no está maduro, que debe madurar en el útero vasco, y que desde este Parlamento podemos favorecer pero favorecer (sic) una propuesta difícilmente viable, en estos momentos no madura, es muy difícil desde una incubadora externa a la propia sociedad vasca, al propio Parlamento vasco."

"Pero sigo creyendo que al útero materno —en este caso al País Vasco y al consenso entre las fuerzas políticas del País Vasco— no lo sustituye en ningún caso ningún sistema mecánico que podamos establecer en el Parlamento del Estado."

(Gaspar Llamazares, diputado de IU y comadrona frustrada)


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Paridario

Alfons Quintà, artículo en el Avui, 3 de febrero:

"Respecto del hecho de que haya catalanes que sean tan bobos, tan botiflers o tan lo que sea para votar al PP es cosa que supera mi capacidad de comprensión".

El hecho de que la supere puede deberse a que, en efecto, su capacidad de comprensión sea ridícula, señor Quintà. En cualquier caso, yo le doy un motivo: en el PP no hay personas como usted, tan encantadas de haberse conocido porque yo lo valgo. No me negará que es una razón de peso para todo el que se sepa humano, imperfecto, falible.